CARMEN CAÑADAS | Almuñecar, Granada, 1957
CARMEN CAÑADAS | Almuñecar, Granada, 1957
La obra de Carmen Cañadas nos recuerda el naturalismo caravaggesco. Su manejo virtuoso del claroscuro nos muestra cómo acentúa los contrastes en las zonas iluminadas sobre fondos neutros, que se pierden en la oscuridad y donde no se intuyen espacios. En contraste, realza casi de forma violenta rostros, manos, telas, con focos de luz lateral, que inciden sobre las superficies realzando los volúmenes. (Carlos Quintana)